12 de noviembre de 2013

ACCION DE GRACIAS

(Boletín 1997)
 Objetivo general:
Que las personas sean capaces de de comprende la importancia de expresar/ demostrar su gratitud al Señor.

Nuestros objetivos específicos por área serán:

En el aspecto cognitivo (conocimiento):
Que las personas sean capaces de aprender por medio de esta lección por qué, cuando y cómo dar gracias a Dios

En el aspecto afectivo (emocional):
Que las personas sean capaces de  tomar conciencia que ser agradecido es un factor importante en la vida cristiana.

En el aspecto volitivo (voluntad):
Que las personas sean capaces de expresar agradecimiento a Dios por lo que El le ha dado, y durante la semana deberá confeccionar una breve lista donde se han sentido responsables de agradecer a Dios por lo que él ha hecho por ellos.

Introducción:

¿Acostumbras a dar gracias a tus padres por lo que hacen por ti?

Generalmente sólo se hace en aquellas ocasiones cuando se recibe algo muy especial, pocas veces por atenciones pequeñas como por ejemplo dar gracias por preparar el desayuno, almuerzo, por tener la ropa limpia, etc., porque se considera que es un deber de la mamá.

A veces actuamos así con el Señor. Miremos la Palabra y pensemos en cómo actuamos con él.

I.                    ¿Por qué debemos dar gracias?

  1. Porque es bien y misericordioso. Salmo 107.1. En este pasaje el salmista usa la palabra alabar, pero él está dando gracias a Dios porque es bueno y por su misericordia. En el libro de Lamentaciones dice que cada día se renuevan las misericordias del Señor y agrega: “…grande es tu fidelidad”.

  1. Porque da sabiduría y fortaleza cuando la necesitamos. Daniel 2.23. ¡Qué hermosa es la expresión de Daniel en este versículo! Muchas veces corremos el riesgo de creer que nuestra sabiduría es porque somos muy inteligentes, olvidando que de Dios viene la sabiduría y también la fortaleza para enfrentar los momentos difíciles. Cada vez que se obtenga un triunfo en el colegio o trabajo, se debe agradecer al Señor y no vanagloriarse por ello.

  1. Por Jesús, el don inefable. 2º Cor. 9.15. Jesús ha sido el regalo más grande dado por Dios al mundo. Cada Navidad recordamos el nacimiento de Jesús, pero la celebración la usamos para darnos regalos entre nosotros en vez de expresarle nuestra gratitud a Él dándole un regalo especial. Ya sea, entregándolo para Su Obra o alguna persona necesitada.

II.                  ¿Cuándo debemos dar gracias?

  1. A menuda. Efesios 5.20. Pablo dice: “Dando siempre gracias por todo a Dios…” por las cosas grandes y las pequeñas, aún  por las pruebas. Debemos dar gracias por cada amanecer, por escuchar cantar los pajaritos, por poder mirar las flores, etc. Todo esto nos muestra el amor de Dios.

  1. Antes de comer. Hechos 27.35. ¿Sólo cuando tenemos un banquete? En una ocasión visité un hogar cristiano muy modesto. Lo que me impresión y emocionó fue lo siguiente: Al volver la hijita del colegio (de unos siete años), la mamá puso una mesa y silla pequeña y le sirvió su once, ésta consistía en una taza de té y una rebanada de pan. La niña se inclinó y cantó “No faltará Jesús, no nunca no, no faltará Jesús”. No hubo queja en ella, sino gratitud.

  1. Al entrar en la casa de Dios. Salmo 100.4. Qué  privilegiados somos de tener un templo para reunirnos y adorar a Dios. Sea grande, mediano, pequeño; construcción sólida o madera, no importa, es el lugar de reunión para adorar a Dios. ¡Qué diferente serían nuestras reuniones si al entrar al templo lo hiciéramos con agradecimiento y no como una obligación de asistir al culto. Nos reunimos porque deseamos hacerlo porque tenemos libertad de culto, es decir nadie nos impide hacerlo. Debemos dar gracias porque tenemos la Palabra y por Cristo que es el centro de nuestra adoración.

III ¿Cómo dar gracias?

  1. Con nuestros labios. Salmo 66.17. al cantar debemos pensar en la letra. Al orar debemos expresarle nuestra gratitud al Señor por todo lo que nos da. Sería bueno tener un cuaderno para anotar las peticiones contestadas y las bendiciones recibidas cada día, para que así Al mirarlo podamos decir: “grandes cosas ha hecho por nosotros”. Esto podemos hacerlo en nuestro hogar.

  1. En unidad con nuestros hermanos. 2º Crónicas 5.13. tenemos cosas comunes por qué dar gracias: el perdón de nuestros pecados, el cuidado de Dios, la gloria que nos espera junto al Señor, la victoria que tenemos por Cristo, etc. En nuestras reuniones deberían haber más oraciones de gratitud. Es bueno que presentemos nuestras peticiones, pero en conjunto mejor es poder agradecer al Señor por sus muchos beneficios.

  1. Dando para su obra. 1º Crónicas 29.10 – 14. Los versículo 13 – 14 nos dicen: “Ahora pues, Dios nuestro, nosotros alabamos y loamos tu glorioso nombre. Porque ¿Quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos”. Para el rey David era un privilegio dar, no consideró lo que hacía como un favor. Al dar para la Obra del Señor debemos pensar que es un privilegio, una bendición y debemos hacer con gratitud.

Aplicación:

Durante estos días ¿has pensado en todos los beneficios que has recibido del Señor? ¿Podrías pagar con tus propios medios la salvación, o sea, el perdón de tus pecados y obtener la vida eterna? En este día al traer una ofrenda no estás pagando tu salvación, ni los beneficios recibidos del Señor, porque esto no sería posible pagarlo con dinero. Estás expresando tu gratitud al Señor por sus muchos beneficios, misericordias y por darse a sí mismo por nosotros.


¿Cuán agradecido estás?

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